miércoles, 16 de junio de 2010

Idem llega a Dalaran

Por fin estaba en Dalaran, que pesado se puso el brujo que pretendía chantajearme por invocarme con el ritual...
-Nunca juegues con una bruja,aunque sea mas inexperta que tu y menos si esa bruja...soy yo.

Comienzo a alejarme mientras mi abisario atenaza al insolente que pretendía mis íntimos favores.

Monto sobre mi ardiente destrero y me alejo al paso,sin prisas, agradeciendo al mago su portal con unas cuantas monedas que le lanzo acompañadas por un guiño.
Ahora mi atención se centra en intentar averiguar donde podrían esconderse....
Doy un extenso paseo relajada maravillandome con cada edificio de la majestuosa cuidad de los magos,escudriñando los rostros de la gente buscando al elfo o a mi madre.

-Me va a resultar muy difícil encontrarles aquí-pienso mientras suspiro desanimada.
Zanphog aparece tras una esquina:

-¡Ya era hora!¿te has divertido con el pobre infeliz?
-Solo le he asustado un poco,había ciertas habilidades secretas de los demonios que aun no conocía-dijo con su voz de ultratumba que tanto me gusta.
-No...¿le has enseñado tu habilidad para traspasar y poseer la carne?el pobre no va a poder ver a su abisario en una temporada....en fin continuemos con la tarea que nos ha traído aquí.

Vi a un troll y decidí seguirle, descendió por una pequeña cuesta que llevaba a otra parte de la cuidad,con decisión comencé a bajar pero una extraña magia me aturdió y me devolvió al inicio.Extrañada lo intente de nuevo corriendo la misma suerte,y así varias veces consecutivas.
Los dos guardias me miraban y reían,una Gnoma que pasaba por allí observando las burlas de los Elfos de Sangre aguardó para saber el motivo de sus carcajadas,mientras yo,tenaz y obcecada lo volví a intentar,creyendo que mi experiencia era la que me impedía acceder ahí.
Frustrada,no podía conseguir bajar la pendiente y tenía que soportar las risas jocosas,ya que en una ciudad santuario esta prohibido atacar.
Si las miradas mataran fisicamente,de otro tipo de forma pueden ser arrebatadoramente mortales,la Gnoma hubiera convertido en polvo a los guardias,tomandome de la mano me indicó que me agachara con un gesto de su dedo indice:
-Es tu primera visita ¿verdad?-solo me dió tiempo de asentir pues al intentar pronunciar una palabra continuó hablando-esa es la zona de la Horda,nadie de la Alianza puede entrar ahí.Por tu insistencia deduzco que buscas algo,¡dimelo si quieres que te ayude soy picara no adivina!.

-En realidad no se exactamente lo que busco,tal vez un lugar en el que la horda y la alianza puedan llevar a cabo extrañas conjuras que aun no he descubierto.
-Hummm-murmuró pensativa-entonces busca en las cloacas-y señalando a su derecha desapareció antes de poder agradecerselo.

La boca del alcantarillado llama mi atención,es la entrada a un mundo subterráneo repleto de oscuridad y trapicheos,curiosidad e intriga por averiguar si lo que busco se encuentra ahí se agolpan en mis emociones,comienzo a bajar mientras mis ojos se acostumbran a la oscuridad solo deshecha por la danzante luz de las antorchas que penden de las húmedas y lúgubres paredes....

No hay comentarios:

Publicar un comentario