jueves, 28 de abril de 2011

Sunstrider.


Necesitaba un paseo,despejarme y ordenar todos los pensamientos que me abordaban,recordé que cierta vez Diosa me dijo que el Quel'danas se respiraba paz y serenidad y que aquel lugar era ideal para deshacerse de las dudas y sumergirse en el sosiego.
Al llegar recordé la hospitalidad de sus gentes para conmigo,sus marciales saludos militares,que te hacían sentir una heroína,cuando en realidad hacia mucho tiempo ya de aquellos días, en que presté mis manos y mi magia en ayuda de la Ofensiva del Sol Devastado.

La calidez del clima invitaba al relax,asique sin pensarlo me despoje de mis pesados ropajes y envuelta en una etérea y cómoda toga Sin'dorei me dirigí a dar un merecido paseo por la orilla de sus largas extensiones de costa.
Descalza notaba como la arena jugaba a arañar con ternura mis cansados pies mientras el agua aderezaba con calidez aquel masaje al caminar,todas mis terminaciones nerviosas eran presionadas y mimadas y el silencio me regalaba el mas bello de los sonidos:la nada unida a mis latidos y morir del mar a mis pies.

De pronto la paz se hizo pedazos,un desgarrador graznido desgarró el aire y llegó a mi alma para pedir auxilio,me concentre un instante para averiguar de donde procedía,se volvió a repetir con claridad y volvió a partirme el corazón,ese lamento animal estaba cargado de tristeza y angustia.

Conforme me acercaba el paisaje cambiaba,la tierra moría tornándose negra,el aire era pesado cargado de aroma a azufre y el característico perfume del fuego vil demoniaco.
Un pequeño dracohalcon azul huía despavorido mientras un Déspota de cólera,blandía su arma amenazante,la criatura se refugio en mis brazos y comencé a crear unas bolas de fuego con las que reduje al demonio a cenizas.




Al desplomarse la fétida criatura apareció majestuosamente un dracohalcon de mayor tamaño,de unos tonos turquesa y verdes arrobadores,sus profundos ojos draconicos se clavaban en mi,atravesándome y dejandome completamente inmóvil,mientras interrogaba a mi corazón que respondía con latidos ligeramente mas tranquilos tras serenarme del combate.
Su cabeza dotada de cuernos,de aterrador aspecto,le otorgaban su fama de temible bestia.

Flotó a mi alrededor,rozandome levemente,mi instinto era acariciarle pero no debía ser irrespetuosa mas cuando su poderoso pico de águila podría matarme con rapidez si se sentía amenazado.

El pequeño seguía entre mis brazos,dándome suaves empujones a modo de caricia,abrí los brazos hacia el adulto pero el menor insistía en quedarse conmigo,aprovechó mis manos extendidas y busco caricias,su textura era extraña,suave al tacto.
Ágilmente se colocó a ras del suelo,signo de sumisión,concediéndome permiso para montar en su lomo.
Su vuelo resultaba delicioso,acompasado,etéreo,suave...a nuestro lado el pequeño giraba,ascendía y descendía mostrando su grácil habilidad.
Absorta,disfrutando de cada segundo me di cuenta de que habíamos llegado a Darnassus y casi no me di cuenta.




-Debo ir a casa-le susurre acariciando la zona blanda bajo su pico.
Sin emitir sonido alguno,tomo un rumbo fijo,acompañados por una suave y tibia corriente de aire durante todo el trayecto llegamos a mi querida Ventormenta

-Allí..-murmure señalando mi casa.

Descendí lentamente de su lomo,apenada por tener que despedirme de tan magnificas criaturas,y cabizbaja les di la espalda para entrar en mi morada,el pequeño dracohalcón se acurrucó en mi mano y en su pico portaba una pluma del adulto,su mirada me inspiraba lealtad y aquel presente era signo de ello,se quedarían conmigo.

-Debo ponerte un nombre entonces ¿no crees?-sonreí mientras le acariciaba.

-¿Que te parece Sunstrider?Eres un dracohalcón y caminas a tu manera por el sol...me gusta ese nombre para ti...ve a descansar ahora,te llamaré pronto.

Lenta y cadenciosamente los dracohalcones se perdieron entre los jardines de mi adorado Barrio de los Magos.

Me dispuse a entrar en casa cuando unos sollozos desde mi habitación me alertaron,corrí hacia allí sin reparar en nada a mi alrededor,sentada en la silla de mi escritorio una desecha Nofertari lloraba con una rosa entre sus manos,sobre el, una cajita de madera y nácar y una jarra de barro, muy familiares para mi,con una nota en lienzo alado.

-Even-dijo la draenei con la voz desgarrada-se ha ido...Arcturius se ha ido...después de mi secuestro,y de aquella noche...

-Espera Nofer,despacio...¿que secuestro?¿quien es ese Arcturius?¿a donde a ido?¿porque lloras?....-dije exhausta y desconcertada.

La sacerdotisa intento calmarse y comenzó a relatarme lo sucedido cuando tomamos asiento...despues de un breve relato que me dejo helada concluyó:

-Tras aquello desperté y ....

martes, 12 de abril de 2011

Secuestro.(2 Parte).

En cuanto salió me levanté con la intención de escapar,pero para mi sorpresa no podía salir de aquel circulo,intenté borrarlo sin resultado,intenté lanzar mi punción sagrada y para mi desesperación no pude pronunciar el hechizo,lo intenté con otros conjuros y tampoco pude,intenté gritar...aquel circulo me había dejado completamente muda...literalmente,no salía sonido alguno ni siquiera el del amargo llanto de impotencia que me provocó la situación.

Examine la fruta muy despacio,parecía sana y jugosa y ciertamente me moría de hambre y sed,la cual tendría que saciar con la fruta pues no había rastro alguno de agua.Justo cuando me disponia a tomar una manzana tras meditar mucho si comer o no,la puerta se abrió.

El circulo que me rodeaba brilló con fuerza en un color morado oscuro,los simbolos se reflejaban en el techo y un agudo y doloroso pitido amenazaba con hacer explotar mis timpanos.
En el lecho idéntico que había junto al mío,aquel troll cubierto por una capucha depositó a una elfa de sangre,dejando sus armas y su ropa junto a mis enseres que instantáneamente se iluminaron con el mismo color rojo.

De complexión delgada,puntiagudas orejas y una abundante melena azul,su aspecto era cansado y desaliñado,inconsciente yacía sobre la fina superficie,diminutas gotas de sudor salpicaban su rostro y su respiración no era buena,entrecortada y poco profunda.

El troll rió contemplando su obra,mirandonos, su siniestra carcajada retumbo en las paredes del pequeño habitáculo haciendo que me estremeciera.

Le mire fijamente y me concentre en interrogarle psíquicamente.

-¿Quien es ella y que le has echo monstruo infame?

-Quieh sabé quieh eh ¿no? Una pequeña sacehdotisa como tu,de hecho-añadió-tu ehtah aquí po erroh eh a ella a quien queremoh...

Le acarició la melena mientras el brillo de la excitación asomaba a sus ojos,única parte visible por la capucha,enredaba sus verdes y extraños "dedos" en ella con claras connotaciones lujuriosas,acto que interrumpí bruscamente amenazando mentalmente a nuestro captor:

-¡Alejate de ella y sueltanos cobarde!

Giró la cabeza bruscamente hacia mi posición, balbuceó unas palabras en un susurro y al instante el circulo que rodeaba el lecho de la elfa se encendió en un rojo intenso como de ascuas,entendí que lo sellaba al igual que el mío.
Se acercó hasta mi y tendió su brazo hasta mi cuello,atravesó el campo de fuerza como si de una inexistente capa se tratara,alrededor de su antebrazo una luz blanca constataba que la cúpula mágica realmente existía,lentamente comenzó a apretar mi garganta

-Así que ehta celoha,bien comenzaré contigo,suhsanare mi erroh yo mihmo...

Su otra mano se poso sobre mi seno derecho y lo manoseo con lascivia mientras yo me debatía por zafarme de su prisión axfisiante.

-Ehta noche voy a gozah de tu cue...

No logró terminar la frase,cayó de rodillas,vi como unos profundos ojos azules salían de entre las sombras junto al rostro del arrodillado troll que en su ultimo estertor escucho una voz en su oído:

-¡De advedtí que do da docara edcodia!

El cuerpo inerte del troll se desplomo y en la mano de aquel enano,cuyo rostro ocultaba bajo una tela negra,una daga cubierta de sangre,la tiró para acudir en mi ayuda mientras entre violentas toses perdía yo la consciencia.

lunes, 11 de abril de 2011

Soledad y sueños...


En la soledad de mi habitación,recostada sobre la cama recordé las sensaciones de aquel día...

El día del ritual,en que dejé de ser la torpe e insulsa maga y pase a ser una mujer tras consumirme en un ardiente y vigoroso fuego.

El tacto de aquel elemental,su aroma,su vigor penetrando hasta lo mas profundo de mi ser...los labios de sejmët su juguetona y húmeda lengua recorriendo mi cuerpo empapado en sudor...

Aquella intensidad,el deseo impetuoso e incontrolable,el intenso placer...y ahora soledad e impotencia...

-Me pregunto...-murmuré-me pregunto si habrá alguna manera de volver a invocar a aquel elemental...

Desde la llama de la vela que me iluminaba surgió la grave y familiar voz de aquel elemental repiquetando en mi mente

-Pidemelo...pidemelo...-repetía.

Mis manos acariciaron levemente mi cuello mientras inundaba mis pulmones de aire en un profundo suspiro,descendí hasta mis senos,desabrochando mi camison y liberándolos a mi antojo para colmarlos con mis propias caricias,rozando levemente mis pezones que se contraían erectos deseosos de atenciones.

Continúe mi placentero descenso con el dorso de la mano,que acaricio mi vientre hasta llegar a mi monte de Venus,antesala de mi ardiente y deseoso volcán donde me detuve mientras un leve rubor pintaba mis mejillas,la profunda voz del elemental sometió mi razón y continúe la exploración de mi cuerpo tembloroso,levantando lentamente la parte inferior de mi ropa.

Mis dedos acariciaron con suavidad al guardián de mi profundo placer que,excitado recibía las atenciones que provocaban oleadas de placer hasta que atrevidos entraron en mi con violencia y sin previo aviso.
Un gemido se escapó de entre mis labios mientras mi espalda se arqueaba sobre el lecho; el intenso vaivén nublaba mi razón mientras rememoraba el calor del elemental sobre mi,haciendome gritar, extasiada.
Los movimientos de mis dedos en mi interior se tornaron frenéticos haciendome alcanzar un exquisito pero solitario éxtasis.
Derrumbada sobre la cama,jadeante,desaliñada y sudorosa un ineludible sueño se apoderó de mi.

No se cuanto tiempo dormí,pero al despertar los rayos del sol juguetones se colaban entre las rendijas de la cortina recordaba retazos de relatos entre las sombras*, entre ellos una dulce historia...sobre un búho...

Reí risueña y me dispuse a cambiarme,asombrada jadee mientras atónita contemple dentro de mi armario el precioso vestido de tafetán y terciopelo azul del sueño...recorrí con cuidado sus bordados sintiendo el suave tacto del tejido entre mis dedos y recordé que en mi fantasía una masculina voz me susurraba tras depositar un dulce beso en mi mejilla:

-"Te mostraré un dulce sueño la próxima noche..."


*http://relatosentrelassombras.blogspot.com

miércoles, 6 de abril de 2011

Secuestro.(1 parte)

Caminaba distraída por las callejuelas de Dalaran,después de aquel intenso ritual yo ya no era la misma.
Me sentía plena,etérea,ágil,ligera como una pluma mecida por el viento suave del verano.Rememoraba,golosa,el álgido momento enque el aire tomo posesión de mi húmeda virtud cuando de repente una mano tapo mi boca y otra rodeo mi cintura desde atrás,por su fuerza supe que era un varón pero no alcanzaba a verle ni a gritar para pedir ayuda.
Tampoco podía conjurar ningún hechizo salvo la nova sagrada para intentar zafarme de mi agresor

-Ni se te ocurra sacerdotisa...-Susurro-Alguien quiere verte y pienso cumplir mi tarea.

Con un ágil movimiento sin apartar su mano de mi boca poso un pañuelo suave sobre mi nariz,el dulzon aroma que desprendia poco a poco fue adormeciendome hasta caer rendida en un profundo sueño.

Un punzante dolor en el cuello me despertó,estaba maniatada y amordazada,abrí los ojos lentamente,la luz tenue de una palmatoria alumbraba el rincón donde se encontraban mis armas y mis ropas que desprendían un extraño fulgor rojo.
La cabeza me daba vueltas y tenía  la boca seca el sabor de aquel pañuelo era horrible,olía a combustible,escrutando el lugar mientras recuperaba la consciencia por completo observe montañas de libros polvorientos y muebles amontonados y mal cubiertos por lonas.Me habían dejado sobre un fino colchón en el suelo tumbada de lado pude ver con claridad y nitidez ya como una rata corría junto a la pared,pequeños haces de luz de lo que parecia ser la luna otorgaban al lugar de una atmósfera tétrica y desoladora.

Miles de preguntas se agolparon en mi mente,¿donde estoy?,¿quien me ha traído aquí?y lo mas importante...¿porque?.
Intente deshacerme de mis ataduras con un decepcionante resultado,busqué a mi espalda algo cortante con lo que poder desgastar la cuerda pero no encontré nada.
En ese momento se abrió la puerta y una encapuchada figura se acerco dejando a mi lado un plato con un trozo de pan y unas piezas de fruta.
Sin mediar palabra me desató con brusquedad,al incorporarme pude ver un circulo con extraños símbolos al rededor de mi improvisado y humilde lecho.

-Grita cuanto desees,nadie pueh oite.

Retiro mi mordaza y se fue sin mas.

Aquellas manos...su acento...se trataba sin duda alguna de un troll.

domingo, 3 de abril de 2011

¿Un sueño?


La tarde era cálida y una suave brisa mecía la hierba como si la acariciara,mientras diferentes tonos de verde coloreaban la danza del viento.
El animal pacía tranquilo,su piel era negra como la obsidiana y sus patas terminaban en un impecable blanco,la melena de sus crines y su cola era también del color del alabastro.

Levantó la cabeza oteando el aire con su olfato y moviendo sus orejas para captar el mas mínimo sonido,milésimas de segundo después el caballo arrancó a galopar frenéticamente,algo o alguien le había echo sentirse amenazado y se alejaba del peligro,era libre.

Una felina criatura le seguía,sin mostrar agresividad corría tras el equino que asustado galopaba por la extensa campiña,llegando incluso a seguir el río,levantando a su paso una lluvia de pequeñas gotas que brillaban bajo el reflejo del agonizante sol.

La pantera,blanca como la nieve con unas extrañas marcas rosadas en sus costados y una especie de collar ritual colgando de su cuello le perseguía sin mostrar signo alguno de fatiga,tras la carrera el felino de un ágil salto se coloco justo delante del caballo mostrando débilmente la dentadura para que se detuviera.

Los músculos de ambos se marcaban claramente,tensos por el esfuerzo,el caballo se alzo en dos patas ,su negra piel se veía brillante por la sudoracion, la pantera observo el despliegue de fuerza de su adversario,con un brillo de admiración en su mirada.

Lentamente se acercaron el uno al otro con cautela,hasta llegar a rozarse mientras ronroneaba la pantera y el caballo golpeaba el suelo con su pata delantera izquierda, relinchando en gesto de aprobación.

Sin previo aviso la pantera se lanzo al cuello del equino que confiado se dejaba acariciar por la suavidad del pelaje de
su compañía.
Tras un destello de blanca luz se desvelaron las verdaderas formas en la oscuridad nocturna...una elfa de melena argenta sujetaba entre sus brazos a un gnomo de pelo verde,los labios de la elfa cubiertos de sangre mientras amargas lágrimas recorrían sus mejillas,el gnomo herido en el cuello yacía ahí...inmóvil.

-¡¡¡No!!!-grito jadeante Diosa al despertarse apoyada en aquel árbol.

Llorando e intentando interpretar lo que acababa de soñar creyó escuchar una tenue respiración a su vera.

-Bicar...-murmuro mientras una profunda sensación de soledad se instalaba en su pecho.

Centró su mirada a su lado y vio al caballo negro como el carbón y de patas blancas como la nieve tumbado a su lado descansando plácidamente.