viernes, 22 de enero de 2010

Lecciones aprendidas.


Recostada miro a mi alrededor y lo que antes solo era gris comienza a tomar color,no de forma repentina sino gradual,aun estando privada de mi absoluta libertad comienzo a darme cuenta de que no es una prisión la estancia que me acoge,entrar y salir depende de mi.
Soy consciente de que este retiro me ha enseñado a madurar,afrontando las consecuencias de mis actos,si;todo acto tiene consecuencias y a veces no precisamente agradables;pero buscando el apoyo adecuado es mas fácil llevar esa "carga" sobre los hombros.

No todo es malo,pues de los acontecimientos desagradables,aunque cueste,que cuesta y mucho,siempre se puede obtener algo positivo,pues el azar no existe,todo ocurre por y para algo.
Aquellos 3 infantes que me recordaron mi inocencia y enfrentarme a la soledad me han otorgado un poquito de esa piel de piedra necesaria para capear el temporal,que se a ciencia cierta que volverá,ahora estaré un poco mas preparada.
Nadie me dijo nunca que la vida fuera fácil,nunca me engañaron,pero es necesario vivirlo y experimentarlo para darte cuenta de esa realidad.

Siento que me toman en brazos, respiro hondo y mengua algo la anterior sensación de ahogo,aunque aun me queda mucho camino por recorrer;a esta maga le queda por vivir y por aprender...

2 comentarios:

  1. Claro que sí... de todo hay que sacar una lección que nos ayude a avanzar... Tal vez los colores a tu alrededor parezcan volver a palidecer tarde o temprano... pero que sepas que siempre tendras, no sólo un par de brazos para sostenerte, sino todo un ejército.

    ResponderEliminar
  2. Puede parecer egocéntrico pero...se que cuento con esos brazos...

    ResponderEliminar