jueves, 30 de septiembre de 2010

De nuevo un sueño.

Volvía a estar ante la fuente,quemandome las palmas de las manos con el intenso frió que desprendía,aun así no podía apartarme de allí,aun sufriendo por las visiones que tenia.

En el reflejo del agua veía a Diosa de pie,encadenada por los brazos,sus ropas rotas apenas cubren las curvas de su esbelta,y ahora maltratada, figura elfica, profundas laceraciones de un látigo en su espalda,sin sentido,abandonada por sus fuerzas,torturada y con un elegante collar pendiendo de su ensangrentado cuello,su melena blanca empapada en sudor y un hilo de sangre recorriendo sus carnosos labios.

-¡Diosa!¡Despierta!¡Diosa!-grito sin éxito mientras un caballero de la muerte se acerca a ella y yo impotente no puedo hacer nada cuando con una risa perversa que resuena en la estancia me da la espalda tapandome la visión de la elfa.

Me incorporo de golpe en la cama,com millares de gotas de sudor brotando de mi,ahogada en llanto

-Even ¿que te pasa?-la voz de Sejmët irrumpió en la habitación-he venido a curate.

-Sejmët...-me abraza a ella con fuerza-no pienso quedarme aquí mas tiempo,por mucho que insistáis,avisa a Bicarbonator...-Sejmët la interrumpió

-Even no estas bien aun..necesitas mas reposo...

-No me voy a quedar de brazos cruzados esperando-afirmé decidida-Avisa a Bicarbonator y dile que se reuna conmigo en Dalaran,y que avise a Thassarian...que venga también,¡pronto!¡corre!.

Adoptando su forma de loba fantasmal Sej salio rápidamente de la habitación mientras yo me aseaba y vestía tras el biombo,una vez sola tuve que tomar aliento aun estaba muy débil pero eso no me detendrá.

-Aun te tengo a ti-el pequeño frasco de fuerza de los titanes brillaba en mi mano,Diosa me lo dio para que lo usara en caso de emergencia y esto lo era.

Mientras me dirijia a Dalaran con mi teletransporte empezó a rememorar los detalles de mi sueño y algo me resultaba muy familiar..ese caballero de la muerte...yo le conozco pero ¿de que?...

A lo lejos divise a Bicarbonator esperandome en la entrada de la posada en cuyo primer piso podriamos hablar con calma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario